Lamium album, ortiga blanca, ortiga muerta

Pertenece a la división Magnoliphyta, clase Magnoliopsida, orden Lamiales, familia labiadas. Planta perenne de 20–80 cm, pelosa. El tallo tiene sección cuadrangular y hojas opuestas, pecioladas, de 25–120 x 10–50 mm, de contorno ovado, toscamente serradas. Se parecen mucho a las de Urtica dioica. Sus pelos no son urticantes como los de la ortiga mayor.

Las flores se disponen en grupos numerosos en los nudos de la parte alta del tallo, verticilastros. El cáliz está formado por cinco sépalos soldados que forman un tubo curvado en cuyo extremo hay 5 dientes tan largos como el tubo. La corola es blanca y está formada por un tubo tan largo o más que el cáliz y se abre al exterior en dos labios; el superior es entero o crenulado, con forma de casco y el inferior presenta dos lóbulos laterales con dos o tres pequeños dientes.

El fruto es un tetraquenio (fruto seco e indehiscente formado por cuatro aquenios, típico de labiadas y boragináceas) cuyas núculas o aquenios  (frutos con el pericarpo endurecido y recubierto por una cúpula en la base) son trígonas y con ápendice truncado.

Es una hierba muy corriente en toda Europa, crece en matorrales, borde de caminos y de cultivos, suele aparecer como mala hierba en jardines, entre la maleza y en lugares no cultivados. En España abunda en los valles del norte, especialmente en los del Pirineo y de la Cordillera Cantábrica.

La ortiga blanca contiene mucílagos, taninos, saponina, glucósidos y jugos minerales. Tiene propiedades astringentes, antiinflamatorias, diuréticas, depurativas, hipoglucemiantes, antirreumáticas, reguladoras de funciones intestinales y expectorantes. Contiene también una histamina que es la base de su acción hemostática,  vasoconstrictora de los vasos pelvianos.

En aplicaciones externas, sirve para el lavado de erupciones dérmicas, eczemas, quemaduras, inflamaciones vaginales, hemorroides y varices; para la preparación de compresas contra estas afecciones. Se emplea también para gargarismos en faringitis y estomatitis

Otra característica de esta planta es su inocuidad; incluso en algunos países europeos, en épocas de mucha hambre, se utilizaron sus hojas, hervidas y sazonadas con condimentos, como alimento. Así las hojas jóvenes se pueden consumir preparadas como si fueran espinacas.

Sus propiedades farmacológicas se refieren a sus acciones tónica y astringente -debidas a taninos; antiséptica y hemostática por flavonoides y fenoles; además la presencia de mucílago le confiere acción demulcente (protección local por su viscosidad, igual que las mucosidades en las membranas mucosas, usada en el tratamiento local de gingivitis, estomatitis, faringitis: en tos y en ocasiones en gastroenteritis).

Bibliografía: 
www.asturnatura.com
www.wikipedia.org