La fatiga suprarrenal deja a los enfermos agotados, irritables e infelices

Esta tiene lugar cuando las glándulas suprarrenales funcionan por debajo de sus niveles provocando que la persona se sienta cansada y estresada.  Una enfermedad no reconocida por la medicina alopática o convencional.

El estrés se ha convertido en la causa y explicación a prácticamente todos los males. Al menos así lo consideran gran parte de los médicos que, ante la muestra de fatiga física, tristeza y cansancio mental, no dudan en diagnosticar que estás estresado. “La fatiga suprarrenal deja a los enfermos agotados, irritables e infelices”. De ahí que sus síntomas suelan ser relacionados con este padecimiento común que surge como consecuencia del exceso de trabajo, situaciones de depresión e incluso menopausia.
La mayoría de la médicos no reconocen la fatiga suprarrenal como un verdadero trastorno ni consideran que sirva como explicación para el cansancio mental, emocional y físico mantenido en el tiempo. No existe evidencia científica que apoye este concepto y la comunidad médica no lo reconoce como un diagnóstico real.
Algunos como el naturópata  Marek Doyle están convencidos de que la fatiga suprarrenal existe y es más común de lo que pensamos: “Los médicos no la reconocen por lo que un gran número de pacientes están siendo despachados con antidepresivos, que es lo último que necesitan”.
La fatiga suprarrenal afecta significativamente a más mujeres que hombres. Debido a que éstas llevan una vida multitarea –actividades laborales, amas de casa y madres, etc.– que derivan en una sobrecarga de trabajo de sus glándulas suprarrenales.

Cuando las glándulas suprarrenales funcionan correctamente, se encargan de producir cortisol una hormona que ayuda a regular la presión sanguínea, reforzando el sistema inmune y ayudando al cuerpo a dar respuesta ante el estrés. Un síntoma llamativo en el desequilibrio de esta hormona puede ser la ansiedad por comer alimentos salados, vinculada a mantener el equilibrio correcto de sodio en el cuerpo.

El exceso de cortisol también puede impedir la absorción de la serotonina que ayuda a mejorar el humor, provocando ansiedad y un estado de ánimo bajo, y también puede conducir a exceso de producción de insulina por el páncreas.
Los desniveles de cortisol también pueden interrumpir la producción de otras hormonas como la adrenalina lo que podría derivar en trastornos del sueño, sensación de tristeza, mareos o cansancio permanente, aumento de la sensibilidad a los ruidos fuertes, incapacidad para bajar de peso.

Diagnóstico, solución y tratamiento:
Para la medicina natural, la fatiga suprarrenal puede aparecer después de haber pasado por un período de estrés, tras haber mantenido una mala alimentación, cuando se duerme mal o después de una infección. Situaciones con efectos directos en las glándulas suprarrenales impidiendo que trabajen con normalidad.

Los posibles fallos en estas glándulas pueden ser medidos por un endocrino. Los niveles de hormonas producidas por las glándulas suprarrenales pueden ser rastreados analizando muestras de saliva durante el día. Sin embargo, es muy difícil conseguir un reconocimiento y diagnóstico a través de la medicina convencional.
De ahí que muchas mujeres que están desesperadas por encontrar una solución acudan a terapias complementarias que ofrecen diferentes tratamientos con el objetivo de calmar y restaurar la actividad adrenal.

Algunas de las soluciones propuestas son:

  • Modificar la alimentación y tratar de comer cinco pequeñas comidas al día –procurar que dos de ellas hacia la mitad del día sean ricas en proteínas– para estabilizar los niveles de azúcar en sangre.
  • Hacer ejercicio con regularidad.
  • Relajarse para aliviar laspreocupaciones que pueden ir desde dar largos paseos hasta pasar una horas descansando en el sofá.

Fuente: No siempre es por estrés, Alba Ramos Sanz, @AlbaRamoSanz, 13.01.2015