Azúcar moreno integral

El azúcar moreno integral se obtiene triturando la caña de azúcar y así se produce un líquido que luego se cristaliza y se muele. La principal diferencia que tiene el azúcar integral con el azúcar blanco es que no pasa por el proceso de refinamiento y por eso conserva sus propiedades nutritivas, por eso también recibe el nombre de azúcar crudo. Su sabor es como a regaliz. Su color es más oscuro por la melaza o miel de caña y su consistencia es pegajosa.

Precisamente para conseguir el azúcar blanco hemos de realizar múltiples refinados y blanqueos. Al final tenemos un producto muy suave y agradable pero sin nutrientes.

Gracias a que no pasa por el proceso de refinamiento, el azúcar integral conserva toda la riqueza de las sales minerales (calcio, magnesio, potasio, sodio, etcétera), fibras y vitaminas asociadas en forma natural a la sacarosa en la caña de azúcar.

El azúcar integral o rubia nos proporciona las siguientes sustancias esenciales:
Hidratos de carbono: por su alto porcentaje, el azúcar integral ofrece energía. La sacarosa del azúcar integral es de tipo simple (disacárido), por lo que resulta mucho más digestible y de lenta disolución, a diferencia de otro tipo de carbohidratos complejos (polisacáridos) como, por ejemplo, las dextrinas o el almidón.
Fibras alimentarias: hacen que la absorción de los azúcares sea más lenta.
Calcio y fósforo: estos minerales son esenciales para la formación y  mantenimiento de las piezas dentales y òseas.
Hierro: vital para prevenir episodios de anemia.
Potasio: colabora en el proceso metabólico.
Magnesio: Los músculos se mantienen relajados y tonificados gracias al aporte del magnesio en la ingesta diaria. Este mineral también cuida el corazón estabiliza la presión arterial y evita la aparición de coágulos sanguíneos.
Vitaminas del grupo B: si bien el azúcar integral no sobresale por su aporte en estas sustancias, estas intervienen en el buen funcionamiento del sistema nervioso y normalizan el metabolismo.

Calorías:
En relación al azúcar blanco (refinado), el integral aporta menos calorías, pero en poca variación. La diferencia sustancial entre ambos productos, es que el no refinado es sacarosa natural (disacárido formado por glucosa y fructosa).

Los mejores azúcares morenos de caña integral son el azúcar moscovado o moscabado y el azúcar panela ya que no sufren ningún tipo de refinamiento que acaben con sus propiedades, el moscovado es un azúcar húmedo ya que solo llega hasta el proceso de centrifugado y el azúcar panela no se cristaliza. Son los tipos de azúcares morenos de caña integral que más propiedades tienen y menos refinados. Los podemos encontrar en las tiendas de comercio justo o herboristerías.

Resumiendo, la diferencia entre el azúcar moreno integral y el azúcar blanco refinada no es muy relevante puesto que habría que consumir enormes cantidades de azúcar, algo muy desaconsejable, para que nuestra salud notase alguna diferencia entre los nutrientes proporcionados por uno otro. Aunque es cierto que el azúcar moreno integral, el real, presenta las ventajas indicadas en el texto anterior.